Trabajo sucio para Campbell.

Hoy será un domingo más en la temporada de los Dolphins de Miami. Movimientos en busca de mejorar los problemas en ambos lados del balón fueron mínimos, prácticamente sin efecto. Más allá de volver a firmar a Sam Brenner centro ofensivo, las demás movidas son puro trámite dentro de la NFL. Esta movida de firmar a Brenner lo podría traer en algún momento a jugar centro y volver a mover a Pouncey a la posición de guardia (G) para tratar de mejorar en algo la protección al mariscal de campo (QB) Ryan Tannehill. Así la línea podría quedar constituida de la siguiente manera: Branden Albert tacle izquierdo, Billy Turner guardia izquierdo, Sam Brenner centro, Mike Pouncey como guardia (G) derecho y Dallas Thomas como tacle derecho. Esa línea si Brenner hace el trabajo en el centro daría una vez más el espacio a la carrera para  establecer las rutas por tierra. La combinación de Lamar Miller y Jay Ajayi podría convertirse en letal dentro del juego ofensivo siempre y cuando Bill Lazor como Coordinador ofensivo establezca la carrera dentro de los patrones ofensivos. El ataque aéreo ha sido consistente durante la temporada comandado por Tannehill y teniendo como principal arma a Jarvys Landry, quien ha contado con la ayuda de Kenny Stills y Rishard Matthews. Una pieza que no se ha hecho notar es el ala cerrada (TE) Jordan Cameron, al principio de su firma los entendidos pensaron que sería el blanco de ataque en la zona roja, pero al momento este casi no es utilizado dentro del patrón ofensivo establecido por Lazor. Cameron podría ser la contestación a los problemas dentro de la zona roja para producir puntos, combinado con el juego por tierra. Soy de los dolfans que no han podido borrar de su mente la jugada establecida por los Dolphins para cerrar la primera mitad en Búfalo  faltando dos segundos para terminar y Lazor envió la formación de paso sin ningún jugador o corredor en la parte trasera y a solo unas pulgadas de la línea de anotación. Una jugada que muchos, menos Lazor, se la hubiesen dado a Tannehill para que utilizase su físico para convertir la anotación, o siendo conservadores hubiesen optado por gol de campo (field goal). Esa y otras decisiones podrían haber manchado para siempre la carrera de Dan Campbell como dirigente en la NFL.

Del lado defensivo del balón la situación parece ser más tétrica. Búfalo se convirtió en verdugo al lograr más de 400 yardas combinadas. Estos consiguieron un total de 266 yardas por tierra y 181 yardas por aire. El principal jugador defensivo de los Dolphins, Brent Grimes, fue atacado consistentemente sin que pudiese neutralizar el juego por aire. Este factor debe estar dando vueltas en la cabeza de muchos, ya que el juego de Grimes es vital para la estabilidad defensiva de los Dolphins. Así la defensiva debe quedar esyablecida para el juego de hoy de la siguiente manera: la línea frontal la constituirán Derrick Shelby, Ndamukong Suh, Earl Mitchell y Olivier Vernon; la defensa central la constituirán Koa Misi, Kelvin Sheppard y Jelani Jenkins; y la defensa trasera estará a cargo de Grimes y Bobby McCain en las esquinas y a cargo de la seguridad (safetys) Walt Aikens y Reshad jones. Nada nuevo, ningún ajuste.

Dan Campbell la semana pasada trabajó como si la temporada ya hubiese concluido tomando una serie de decisiones que parecieron sacadas de un juego de pequeñas ligas. Si esas decisiones se hubiesen convertido en puntos hoy todos los comentaristas estuviesen alabando su forma de dirigir. Pero lamentablemente para Campbell todas fallaron. El intento de pase con dos segundos por terminar la primera mitad, el aceptar la penalidad en vez de declinar y obligar a los Bills a entregar el balón o tratar un gol de campo de más de 55 yardas, y la conversión del de 4to intento que fue abortado por la penalidad de Jason Fox, todo conspiró contra Campbell. De paso yo hubiese dejado libre tras el juego al veterano Fox, luego de que este fuera responsable de unas seis penalidades, todas y cada una de ellas en momentos claves del juego. En fin, en una temporada que parece haber concluido, donde solo un milagro podría cambiar el rumbo de la misma, a Dan Campbell solo le queda hacer el trabajo sucio de probar el personal que tiene disponible con miras a evaluar quien se quedara la próxima temporada y quienes abandonaran las filas Dolphins. Jason Fox sería una buena pieza para comenzar los recortes.