Esta tarde comienza una nueva temporada para los Dolphins de Miami, pero también podría ser el comienzo de un nueva era para estos. Luego de una temporada plagada de escándalos y donde reinó la inconsistencia, los Dolphins y su administración decidieron hacer cambios radicales en su cuerpo técnico y en la oficina principal. Los nombres más sonados fueron Dennis Hickey como nuevo Gerente General (GM) en sustitución de Jeff Ireland, y Bill Lazor como Coordinador Ofensivo en sustitución de Mike Sherman. Hubo cambios de personal y contrataciones en ambos lado del balón. Llegando jugadores como Branden Albert ya establecidos en la NFL, y novatos que buscan hacer nombre como Jarvis Landry (WR), Damien Williams (RB), Ju’Wan James (OG) y Jordan Tripp (LB). Su primer juego lo será frente a un rival de la conferencia, Los Patriots de Nueva Inglaterra. No es un rival cualquiera, es un equipo con un mariscal de campo (QB) en Tom Brady que no solo llegara al salón de la fama de la NFL, sino que es reconocido ya como uno de los mejores en la historia de la liga. Un rival bien dirigido por el astuto y estudioso Bill Belichick, considerado uno de los mejores dirigentes de la liga; y un rival con una impresionante racha de victorias en juegos inaugurales, para 10 victorias y 1 derrota en sus últimos 11 juegos de apertura. ¿Qué mejor tarde podría haber para demostrar que los Dolphins pueden ser de nuevo contendores en su división?
La nueva ofensiva que trae el nuevo coordinador ofensivo Bill Lazor descansará en las manos de Ryan Tannehill, quien estará en su tercera temporada como mariscal de campo (QB) de los Dolphins. Es su momento de demostrar que puede cargar a un equipo a la post temporada de la NFL. Para esto contará con una nueva y mejorada línea ofensiva que debe darle el espacio y el tiempo necesario para implantar su nuevo patrón ofensivo, y protegerlo de las más de 50 detenciones (sacks) que sufrió la pasada temporada y que lo llevaron a ser el líder de ese dudoso departamento en la NFL. Para eso contará con la más impresionante artillería ofensiva que hayan podido presentar los Dolphins en mucho tiempo comandada por Mike Wallace junto a Brian Hartline y Bradon Gibson por el aire, y Knowshon Moreno, Lamar Miller y Damien Williams por tierra.
Es una tarde difícil de predecir, con un rival muy peligroso y donde los Dolphins buscan retomar la ruta ganadora en la NFL. Donde se probará si se tomaron las decisiones correctas al momento de contratar el talento y donde se probará si la nueva ofensiva será productiva en las manos de Ryan Tannehill. Será una tarde emocionante en el estadio Sun Life con quizás la mayor asistencia de dolfans en mucho tiempo, donde los Dolphins trataran de definir una nueva era en la historia de la franquicia.
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